Vetysana es Pilar Muñoz, veterinaria y doctora en anestesia. Actualmente ejerce en Córdoba y la conocimos por organizar la I Cumbre del duelo animal en 2021. Hemos querido hablar con ella para conocer más su labor y por qué no solo evolucionó hacia la veterinaria integrativa, sino también hacia el coaching para otros profesionales veterinarios.
¿Cómo fue tu evolución desde la veterinaria convencional a la integrativa y el coaching?
Trabajé durante varios años en la Facultad de Córdoba, donde sigo colaborando, y en un centro oncológico de radioterapia para animales. Allí sufrí una crisis personal, ya que no sabía gestionar todas las emociones que se generaban allí. Sin embargo, salí fortalecida de esa experiencia. Me hice mucho más consciente del efecto de las emociones sobre la enfermedad y la curación. Descubrí la acupuntura de la cual me enamoré, así como de todas las disciplinas de la medicina oriental veterinaria y otras terapias integrativas. Por otra parte, desde siempre me ha atraído muchísimo el crecimiento personal, por lo que estudié coaching, inteligencia emocional y programación neurolingüística para ayudar a otras personas, ya sean veterinarios o amantes de los animales a tener una vida más plena.
Hemos escuchado muchas veces que el cuidador/a debe cuidarse. Por eso nos parece tan importante tu misión: «ayudo a veterinari@s y a amantes de los animales, a tener menos estrés, mejorar su conexión con el cliente y gestionar los momentos difíciles en la clínica diaria como es la muerte de los animales y la gestión emocional». ¿Cómo lo haces?
Actualmente tengo un programa específico para veterinarios en el que intercalo sesiones de coaching individual con formación en los diferentes apartados de la clínica diaria que generan estrés para el veterinario como es la conexión y comunicación con el cliente, la gestión de conflictos, la eutanasia, la muerte y el duelo de sus pacientes, etc. Así mismo, en mi consulta diaria siempre busco la forma de ayudar al humano que acompaña al animal, dándole la vuelta a la perspectiva, despertando la consciencia, agradeciendo lo vivido, o entendiendo que las emociones de unos afectan sobre los otros.
En 2021 organizaste la I Cumbre del duelo animal. Nos encantó, tanto el enfoque como la cantidad de expertos de distintos ámbitos que reuniste, ¿cómo valoras la experiencia? ¿Tienes pensado realizar otro evento similar?
A veces nos pasan cosas en la vida y en su momento no sabemos muy bien el “para qué”… ahora con perspectiva sé claramente el “para qué” de la cumbre… en este vídeo explico mis aprendizajes sobre la muerte gracias a la cumbre del duelo. Tras grabar ese vídeo sentí la necesidad de volver a relanzar la cumbre. Además, he aprovechado para incluir también otras charlas como el duelo en niños, cuidados paliativos en casa o el vínculo humano-animal. La cumbre estará disponible del 31 de octubre al 6 de noviembre de 2022 en honor a todos los que ya han trascendido. Podéis acceder a la Cumbre del duelo animal AQUÍ.
¿Cómo entiendes tú la veterinaria integrativa? ¿Crees que el número de profesionales que adoptan este enfoque va creciendo a buen ritmo o realmente todavía son muy pocos/as?
La veterinaria integrativa no sustituye a la veterinaria tradicional, sino que la integra, es decir, usa la medicina de siempre añadiéndole otros productos, otras terapias que integran no sólo al cuerpo físico, si no las emociones, el entorno, la alimentación, etc.
La especialización en la medicina, ya sea humana o veterinaria, es muy buena porque te permite profundizar en un área, hacerte “el mejor”… pero, en muchas ocasiones se olvida que el perro no es solo unos ojos, un corazón o una pata rota. Y a veces los pacientes van pasando de servicio en servicio, pero nadie ve al animal como un ser integral. Para mí eso es la veterinaria integrativa. Es sumatoria… Y creo que cada vez hay más profesionales integrativos. Yo llevo desde el 2019 y gracias a la cumbre conocí a muchísimos veterinarios maravillosos que hacen cosas realmente alucinantes. Hay mucha ciencia que avala las terapias alternativas. Pero también recordemos que los microbios existían antes de que inventáramos el microscopio. La ciencia solo demuestra lo que ya sabemos que existe. Ahora la neurociencia está en expansión, por ejemplo, con la meditación. Sin embargo, los budistas ya conocían todos los efectos beneficiosos antes de que la ciencia lo avalara, así que en muchas ocasiones, la ciencia va después. Una frase que me gusta mucho es: «porque no lo veas, no quiere decir que no exista».
¿Cuáles son las terapias naturales que más empleas, sobre todo en casos de desequilibrio emocional en los animales?
Yo empecé con la terapia floral y la aromaterapia, y son terapias que me gustan bastante, pero, además, me gusta mucho implicar a las familias. Para mí un animal y su humano son una entidad energética que está vinculada. Los humanos estamos continuamente sometidos a estímulos externos, el jefe, el trabajo, los amigos, la familia, etc. e internos, como nuestros miedos, nuestra culpa, nuestra frustración, etc. Los animales, sin embargo, tienen una vida más basada en el presente, nos esperan «tranquilamente» en casa hasta que nosotros llegamos con toda esa nube negra encima de nuestra cabeza que… ¿a dónde va? Las emociones se contagian. Somos perfectamente capaces de sentir las emociones de otras personas. Por ejemplo, el ambiente se corta con un cuchillo cuando estamos delante de dos personas que no se soportan. Si nosotros somos capaces de percibir eso, ellos también. Por tanto, lo primero que hago cuando tengo un problema emocional de un animal es preguntar si ha vivido alguna experiencia que haya podido producirle eso. La segunda pregunta es: ¿quién de la familia acaba de vivir algo que produce esta emoción? Y voilá…. se acaba viendo de dónde vienen esas emociones. Por eso me gusta tratar al animal y dialogar con la familia, y entre todos volver a restablecer el equilibrio. También utilizo la acupuntura y la fitoterapia china para problemas emocionales.
Nos interesa en especial saber cómo empleas la fitoterapia, ¿cuáles son los elementos que incluirías en un botiquín casero natural básico para perros y gatos?
Yo trabajo mucho con fitoterapia china, que es la que más he aprendido, me encantan también los aceites esenciales, la artemisa y el CBD. Me queda muchísimo por aprender en esta disciplina. Volver al origen. Al final, de ahí nacieron muchos de los medicamentos que hoy día tomamos.
¿Cuál es tu opinión sobre algunos de los productos naturales más vendidos actualmente?
- CBD: lo uso muchísimo. Al practicar la acupuntura, muchos de mis pacientes son abueletes con dolores crónicos y el CBD va super bien, así como para la disfunción cognitiva y la epilepsia. ¡Está en mi top ten!
- Pre y probióticos: son productos necesarios en un botiquín natural de perros y gatos.
- Artemisia annua: la he utilizado en casos de leishmania con buenos resultados y como inmunoestimulante en pacientes oncológicos.
¿Qué consejos darías a alguien que comparte su vida con un animal y quiere hacer todo lo posible para que viva sano y feliz?
Sobre todo, diría que aprenda del pequeñ@ maestr@ que tiene a su lado. Creo que nos enseñan a vivir de verdad. También aconsejaría:
- Que viva el presente y disfrute del compi animal el tiempo que le es regalado y que no sabemos cuánto es.
- Que cuando pare, pare, que deje el ruido mental a otro lado, la competencia, el querer ser el mejor, etc.
- Que ame incondicionalmente, a los que le rodean y a su propio animal, lo que quiere decir soltar cuando hay que soltar… No pretender que deje de disfrutar como le gusta, ni que sea como nosotros queramos. Así mismo, acéptate tal como eres, tal como tu animal te adora.
- Que juegue, que la vida son dos días y ya han pasado uno y medio. Pásatelo bien, revuélcate, corre, ríe y disfruta cuando vayas a comer.