Sonia de Bizcarra es veterinaria y la fundadora de la clínica Homyvet veterinaria integrativa en la localidad de Mañaria, Vizcaya. Asegura que la forma en la que trabaja podría ser el sueño de cualquier estudiante de veterinaria porque puede escuchar a cada familia que viene con su peludo y trata cada caso de forma individualizada. Su objetivo es ir al origen de la enfermedad, para curar de verdad y poder mejorar la calidad de vida del animal y la de su familia. Además de haber estudiado Veterinaria, se ha formado en homeopatía y otras terapias y técnicas naturales, llegando a especializarme en medicina natural para animales. Por eso, además de conceder una gran importancia a la alimentación, en sus tratamientos emplea herramientas como fitoterapia, homeopatía, micología… de forma individualizada según la necesidad en cada caso. En la siguiente entrevista ella misma os cuenta más detalles:
Sonia, ¿nos puedes resumir tu trayectoria profesional y cómo has llegado a ser una veterinaria integrativa?
Siempre quise ser veterinaria. Me licencié en la Universidad de Extremadura hace 15 años y desde entonces he trabajado en diversos centros veterinarios y hospitales de referencia de España. Durante esos años veía las limitaciones que tenían las consultas, por tiempo, tratamientos, etc. Pero lo que, sobre todo, hizo que me convirtiera en una veterinaria integrativa fue una experiencia familiar: a mi madre le operaron de una cirugía de cataratas en la que contrajo una infección. Los mejores oftalmólogos pronosticaban la pérdida del ojo. Mi madre se curó con homeopatía. Y eso fue lo que me llevó a formarme en esa herramienta para poder aplicarla a mis pacientes en casos como los de mi madre que parecían “no tener solución”. Los resultados fueron espectaculares y cada vez me demandaban más estos tratamientos. Después fui, y sigo, incorporando otras herramientas naturales para poder disponer de mayores opciones terapéuticas.
Hace diez años abriste tu clínica Homyvet Veterinaria Integrativa, ¿cómo es una consulta en Homyvet?
Me gustaría destacar que creé Homyvet Veterinaria Integrativa con la intención de ofrecer una forma totalmente diferente de ejercer la veterinaria, y así se nos ha reconocido recientemente con el Premio en la categoría de Innovación por la Confederación Empresarial de Comercios de Bizkaia (CECOBI).
En cuanto a las consultas, son toda una experiencia. Suelen decir que es “como estar en casa”. Por las instalaciones, la forma en la que trabajamos y cómo nos dirigimos a nuestros pacientes y sus tutores. Nos esforzamos por crear un ambiente libre de estrés, por ejemplo, la exploración es en un sofá en vez de en mesa metálica; usamos termómetro ocular en vez de anal; tenemos en cuenta las señales de calma; usamos aromaterapia, etc. Lo hacemos como nos gustaría que hiciesen con nuestro perro o nuestro gato.
¿En qué se diferencia de la de un profesional veterinario convencional?
En Homyvet Veterinaria Integrativa las consultas son muy distintas a las de un veterinario convencional, por duración, procedimientos, tratamientos, etc. Por eso conseguimos resultados diferentes. ¿Cómo lo hacemos? Estudiando cada caso con detenimiento antes de la primera consulta con el formulario que nos envían, junto con las pruebas médicas y tratamientos ya realizados.
Tengo en cuenta tanto los aspectos físicos como emocionales del animal y su familia. Parte de la hora de consulta está reservada a las explicaciones para que los tutores comprendan los procesos fisiológicos que está desarrollando su animal y por qué les ofrecemos esas propuestas. Posteriormente, les citamos en de forma presencial y les entregamos el dosier del resumen de la consulta con el tratamiento propuesto. Hago hincapié especialmente en la nutrición, puesto que es uno de los pilares de salud. Sobre ella añado otras herramientas como fitoterapia, homeopatía, micología, zoopharmacognosis, terapia neural, kinesiología, etc. de forma individualizada según la necesidad en cada caso.
La Leishmania en perros es una dolencia que preocupa a muchas personas, ¿qué consejos darías de cara a evitarla y tratarla?
Siempre digo que no hay mejor tratamiento para la Leishmania, y para todo, que un organismo fuerte con salud. Esa sería la primera medida que deben buscar. A eso le recomiendo añadir repelentes y Artemisia annua, por supuesto, tanto para la prevención como para el tratamiento de Leishmania. Llevamos muchos años utilizando Artemisa annua con magníficos resultados.
En Herbolario para animales también recibimos multitud de consultas sobre problemas dermatológicos en perros, en tu opinión, ¿a qué se deben principalmente?
La piel refleja lo que lleva uno física y emocionalmente. Si existen carencias nutricionales, de lo último que se va a ocupar el organismo es de “estar guapo” y eso se traduce en un problema dermatológico. Además, estamos trasladando los niveles de estrés de los humanos a nuestros perros y gatos, de forma que cada vez existen trastornos dermatológicos que son de origen emocional.
En lo que respecta a gatos, nos encontramos con muchos problemas renales y de vejiga, ¿crees que la alimentación es la principal causa? ¿Influyen también los problemas emocionales en el hogar?
A mí me contaron en la facultad que los gatos tenían predisposición anatómica para tener problemas renales. No es cierto. Sin duda alguna, es la alimentación seca la que predispone a esa patología. Además, ellos son parte de la familia. Si tú estás preocupado por tu minino, ¿por qué no lo va a estar él por ti? Súmale que se le imponen unas condiciones de vida como la de vivir sin salir de casa, en la mayoría de ocasiones, y tendrás la explicación de muchos problemas físicos y emocionales.
Para finalizar, ¿nos podrías dar tu opinión acerca de algunos de los productos naturales para vendidos en Herbolario para animales?
- CBD: utilizo mucho CBD especialmente para casos de epilepsia y traumatología. Es importante conocer la dosis efectiva porque normalmente se dosifica de forma incorrecta sin que pueda aportar al efecto deseado.
- Hongos medicinales: ¡Maravillosa herramienta la micología! La recomiendo, sin duda, porque su acción inmunomoduladora para distintas dianas terapéuticas es de las herramientas más seguras.
- Harpagofito: indispensable para problemas articulares. Es el gran descubrimiento para muchos tutores que se sorprenden de sus grandes beneficios.
- Cúrcuma: recomiendo utilizarla con precaución para obtener una acción antiinflamatoria sin consecuencias negativas a nivel digestivo.
- Artemisa annua: la reina de la fitoterapia para luchar contra la Leishmania. Así lo demuestran los estudios y nuestra experiencia desde hace 10 años.
- Boswellia: la empleamos buscando una acción sinérgica con otras plantas. Contribuye a la estabilización de casos de patología articular evitando otro tipo de medicaciones convencionales con efectos secundarios no deseados.
- Pre y probióticos: aquí podríamos hablar muchas horas… Empiezan a ser conocidos en veterinaria, pero aún sin saber usarlos por la mayoría de veterinarios convencionales. En nuestra consulta tenemos una amplia gama de pre y probióticos para prescribir en cada caso.