Entre los cuidados básicos que debemos prestar a nuestros perros y gatos figura mantenerles a salvo de los parásitos externos e internos. En lo que respecta a estos últimos, los intestinales son los más habituales. Cualquiera que haya visto a su perro arrastrar el culete por el suelo, sabe a qué nos referimos. Puede tratarse de las glándulas anales que necesitan un vaciado… o puede tratarse de parásitos internos. También los gatos sufren parasitación intestinal, no hay que descuidarse aunque no salgan de casa, aunque es cierto que el riesgo es menor.
Las señales de alarma son más o menos llamativas:
- Diarreas o vómitos frecuentes
- Fiebre
- Arrastrar el ano por el suelo y lamérselo
- Dejar de comer o tener poca energía
- Pelaje sin brillo
- Heces cubiertas de moco
- Pequeñas lombrices onduladas o como su fueran granos de arroz en las heces
- Anemia, cuando la infestación es grave, sobre todo si se trata de cachorros
En cualquier caso, ante cualquier sospecha, acude al veterinario para que le realice una prueba de muestras fecales de tu animal. Con ello comprobarás si tiene parásitos y de qué tipo son.
Algunos de los más comunes son:
- Gusanos redondos
- Tenias
- Estróngilos (otro tipo de gusanos redondos)
- Gusanos látigo
- Giardia
- Coccidia
Como siempre, lo importante es prevenir, pero tanto para evitar la aparición de parásitos internos como para combatirlos, existen formas naturales y sin efectos secundarios como ocurre con algunos antiparasitarios químicos muy agresivos.
Prevenir y eliminar los parásitos intestinales
Lo primero es ayudar a que el sistema inmunológico de tu perro o gato esté fuerte y con ello reducir las posibilidades de que les resulte fácil a los parásitos instalarse en su intestino. Recordemos que aproximadamente el 80% del sistema inmunológico se encuentra en el intestino. De hecho, si las defensas de tu perro o gato están altas, puede que haya tenido lombrices intestinales y ni te hayas enterado porque no le han enfermado y las ha expulsado de forma natural.
En cualquier caso, estos son nuestras recomendaciones:
Dieta natural. Una alimentación equilibrada, bien natural (BARF o ligeramente cocinada) o a base de comida húmeda ecológica preparada. En el caso de perros, sobre todo, también es beneficioso añadir pequeñas cantidades, 1 cucharada para un perro de 8-10 kg, de ciertas frutas y vegetales que ayudan a que el tracto intestinal sea menos atractivo para los gusanos. Por ejemplo: zanahoria cruda rallada, berro, hinojo, papaya o calabaza. En cualquier caso, lo mejor es que un veterinario nutricionista elabore una dieta individualizada.
Probióticos y enzimas digestivas. Una o dos veces al año te recomendamos suplementarle con probióticos y enzimas digestivas como la bromelina.
Antiparasitarios naturales. Tanto para evitarlos parásitos externos como internos, te recomendamos nuestra propuesta es que uses productos naturales en lugar de químicos que pueden provocan a tu perro o gato efectos secundarios a corto o largo plazo. Plantas y productos naturales como el ajenjo, el ajo, el vinagre de manzana, el aceite de coco, las semillas de calabaza y de comino negro, el clavo, la hoja de olivo o de neem, etc. son muy útiles para evitar y eliminar parásitos intestinales. Sin embargo, aplicar la dosificación adecuada es vital para conseguir beneficios y no al contrario.
En el caso de la prevención se debe administrar una determinada cantidad, mientras que si ya hay infestación, la cantidad es otra. Por eso, te ofrecemos diversos productos de fitoterapia para animales con efecto antiparasitario con dosificación recomendada para perros y gatos.
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También te recomendamos extremar la protección frente a los parásitos externos durante todo el año, ya que algunos de los parásitos intestinales provienen de la picadura de pulgas o de ingerir heces de perros infestados o de hierba, agua, etc. en la que también había parásitos. Hay diversas opciones naturales contra los parásitos externos como pulgas, garrapatas y mosquitos como los collares, dosificadores y pipetas de aceites esenciales. Y también en formato polvo para administrar con la comida. Si quieres saber más sobre antiparasitarios naturales externos, haz click aquí.
